Una fábula con mucho aprendizaje sobre emprendimiento.
Un sabio y su discípulo caminaban por el bosque cuando encontraron una casa bastante humilde.
Se acercaron y descubrieron a una familia.
Triste, con ropas sucias y apenas subsistiendo.
El sabio les preguntó sobre cómo se ganaban la vida.
A lo que el padre de familia, de forma muy humilde respondió que tenían una vaca.
Esta les daba leche que después cambiaban por más alimentos en el pueblo vecino.
Y se quedaban con una parte para su consumo.
El sabio y el discípulo se marcharon al día siguiente.
Pero mientras lo hacían, el sabio le pidió a su discípulo que tomara a la vaca y la arrojara por un precipicio cercano.
El discípulo se quedó incrédulo y espantado.
Pero se puso en marcha con el plan al ver el silencio del sabio.
Años después, el discípulo tenía mucho pesar.
Sabía que la vaca era el único sustento y que seguramente la familia la habrá pasado muy mal.
Así que regresó a buscarlos.
Cuando llegó, encontró un lugar muy diferente.
Una casa hermosa, niños jugando en el jardín, un auto en la cochera.
Su primer pensamiento fue que probablemente aquella familia humilde había tenido que vender su casa.
Lo que le provoco una profunda tristeza.
Pero cuando se acercó vio al padre y se dio cuenta que era la misma familia.
Sorprendido le preguntó al padre que había pasado.
Y este le contestó:
“Teníamos una vaca que se fue por un precipicio y perdimos todo, y tuvimos que buscar otra forma de sobrevivir.
Tuvimos que pensa diferente para poder ganarnos la vida.
Gracias a eso ahora tenemos más de lo que necesitamos.
Gracias a que la vaca se fue al precipicio.”
Bien, todos tenemos una vaca.
Algo que nos ata para no buscar más allá de lo que tenemos.
Para no buscar aquello de lo que verdaderamente somos capaces.
La vaca para algunos puede ser una relación.
Para otros vivir en casa de sus padres.
Y para algunos otros puede ser un empleo.
Un empleo que no disfrutan, que los hace infelices.
Pero en el que tienen que permanecer para subsistir.
Y pierden su oportunidad de emprendimiento.
Claro, para mejorar tu oportunidad de emprendimiento, ya sea que lo hagas de tiempo completo o sin dejar tu trabajo.
Algo que funciona para ambos casos, es aprender a vender con tus palabras.
P.D. Abajo te suscribes, y recibes cada día un consejo sobre copywriting y ventas.